Cada vez es más frecuente el intento de  ciberestafa mediante la remisión de facturas fraudulentas allegadas desde servicios corporativos como el correo electrónico. A continuación se indican una serie de consejos prácticos para evitar ser víctimas de  ciberestafas de este tipo:

• No realizar ninguna transferencia bancaria sin comprobar la legitimidad y autenticidad de la factura. Estas solicitudes suelen ser muy convincentes, desconfiar ya que pueden estar  suplantando la identidad de una entidad o persona legítimas, y acercar información precisa obtenida de manera fraudulenta. Es necesario revisar bien el NIF, concepto, importe, número de cuenta, etc.
• Permanecer especialmente alerta de las solicitudes de cambio de un número de cuenta bancaria. En el caso de recibir una solicitud de este tipo, contrastar su veracidad por otros canales como puede ser el teléfono. Es importante realizar la llamada a un número de teléfono oficial de la entidad abastecedora, y no a cualquier otro proporcionado por otras vías.
• Es importante desconfiar ante supuestas urgencias o alusiones a que se siguen indicaciones de determinados cargos, mismo se se reciben desde entidades o personas de confianza ya que estas pueden estar siendo  suplantadas. Se tiene a más mínima duda de la veracidad de una comunicación, contacte por otro medio con el remitente y confirme que realmente le envió ese mensaje.
• Permanecer alerta de los intentos para conseguir información sobre facturas. Los ciberdelincuentes suelen utilizar distintos mecanismos como lo de solicitar el envío de una factura “para ser revisada” previamente a su tramitación.
• En el caso de recibir una factura duplicada, contactar inmediatamente con la entidad abastecedora.
• Ante cualquier duda sobre la legitimidad y autenticidad de la factura, ponerlo en conocimiento de la UAC a efectos de la notificación del intento de  ciberestafa.